Analfabetismo en la Universidad

Hoy he visto un artículo en el Ideal de Granada (20.03.10) en su octava página una supuesta noticia titulada <<La U.G.R. ni habla ni escribe en femenino >>. Al leerlo pasé por tres fases: Perplejidad -¡¿qué ?!-, negación: no puede ser verdad, ¿dónde está el chiste? – y por último desolación y rabia, además de miedo. Desolación por ver cómo también la ñoñería y la estupidez se han adueñado de la Universidad. Rabia y miedo porque veo cómo mi referente académico ideal, transgresor de ideas y adalid de la razón, está politizado en el peor sentido de la palabra.

La perla en cuestión es un documento llamado, agárrense los machos, «Guía del lenguaje no sexista» elaborado por la Unidad de Igualdad de la Universidad de Granada, y aprobada por su Consejo de Gobierno. Ahí queda eso. Ahora resulta que en las universidades también se crean unidades de esas. Ya puestos, yo propondría crear una unidad de paro y otra de sostenibilidad – ¡ah! y una de sinergias – para que elaboren una guía de cómo conseguir trabajo sostenible y sinérgico, hala.

Según el Ideal (sic) <<La Unidad de Igualdad entre mujeres y hombres de la Universidad tiene como objetivo que se avance en las cifras y en el buen uso, por ejemplo, de las palabras. […] Es una guía breve que hace una serie de recomendaciones con el lenguaje sexista en la Universidad granadina, que lo hay. >> – Me pregunto si el periodista pertenecerá a la citada unidad – Y añade » Un simple ejemplo, se suele escribir y decir que << unos se matricularon y no pagaron tasas (sexista) >>. En la guía se recomienda que se utilice << unas personas se matricularon y no pagaron tasas (no sexista) >> – O sea que a la U.G.R. le preocupa que esos unos no sean unas, no vaya a ser que todo el mundo crea que son las unas las que no pagan las tasas, ¡pardiez qué machismo! Claro que visto de otro modo, puede ser que los unos no pagan porque son unos jetas (bueno, jetos), y las unas, muy cumplidoras ellas, pagan religiosamente – pero eso es ¡feminismo! ¡discriminación!- No me queda claro oiga. Eso sí, la Universidad haría bien en aclarar quiénes no pagan, si no va a tener algunos problemillas para cuadrar sus cuentas. Grave.

Según la directora de la Unidad, Aurora López, la guía pretende (sic) << facilitar a la comunidad universitaria un instrumento útil y de sencillo manejo que sirva para aclarar las dudas planteadas en la utilización de un lenguaje igualitario >> – ¿Qué diantres significa esto?¿Acaso una guía de bolsillo que llevará cada estudiante y estudianta para establecer una políticamente correcta conversación? – Al principio supongo que costará un poco, sobre todo a la hora de tomar apuntes, pero ya se acostumbrarán, ya saben, «unas partículas subatómicas portadoras de carga negativa (no sexista) » en lugar de «unos electrones (clara connotación sexista)».

Las doce páginas del documento no tienen desperdicio, vocabulario igualitario incluido. Pero lo más fascinante es su contundente argumentación que gira en torno al uso del masculino genérico (sic) << se trata de una de las medidas contempladas como importantes en las políticas de igualdad >> – que me expliquen desde cuándo la Universidad ha de hacer política de ninguna clase – <<[…] la lengua es un vehículo de pensamiento, de expresión, de un comportamiento ante diversas actitudes, entre las que se encuentra nombrar en masculino basándose en normas gramaticales exclusivamente >> – un lenguaje que se base en normas gramaticales, ¡qué despropósito! << sin permitirle al lenguaje que evolucione de acuerdo con la sociedad >> – once siglos de castellano y seguimos hablando igualito que en los códices de San Millán de la Cogolla, y todo por culpa del maldito masculino genérico.

Quizás la señora López, su Unidad y el propio Consejo Rector de la U.G.R. deberían ir más a la Universidad para enterarse bien de qué es una lengua, y cómo evoluciona. El lenguaje está en continuo movimiento, de otra manera desaparece. Su asentamiento es fruto de maceraciones centenarias repletas de fusiones, mezclas con hablas y dialectos, incorporación de neologismos etc. Por tanto es inútil, además de estéril, cualquier imposición de usos lingüísticos, así como tratar de luchar contra una ley quasi natural, la ley de economía expresiva, responsable la existencia del masculino genérico.

Según el diccionario de la R.A.E., analfabeto, en su segunda acepción, es ignorante, sin cultura, o profano en alguna disciplina. De ésos ya hay muchos en nuestra clase política, y en particular en el Gobierno de España. Nuestros cuartos se malgastan en palabrería absurda y demagógica, así como en ministerios estériles, todo ello en pro de la de la igualdad. Y sin embargo, les importa un pepino el lamentable estado del sistema educativo de éste nuestro país. Lo que no me esperaba es que la Universidad, uno de los garantes y refugios de la razón, también hubiera ese analfabetismo activo y tan peligroso para nuestro futuro. Quizás eso explica la gran solución adoptada por la universidad pública y por la que comienza a adquirir fama fuera de nuestras fronteras: a menor nivel académico de los alumnos novatos, menor exigencia. ¡Olé!

Si queremos madurar como sociedad, y eso implica obviamente la erradicación de absurdas discriminaciones, como las que sufren aún muchas mujeres sobre todo en el ámbito laboral, la solución pasa por la educación. Una educación no sólo basada en instrucción de contenidos académicos, sino en el respeto a los valores cívicos y socialmente éticos, en definitiva en la formación del individuo para vivir en sociedad.

14 comentarios en “Analfabetismo en la Universidad

  1. Estoy totalmente de acuerdo, yo trabajo en un Centro de la Mujer de Asesora Jurídica y se de lo que estás hablando, creo que se está utilizando el tema de la igualdad, en muchos campos, para tapar otros problemas mucho más importantes que tenemos en España, es una lastima pero mientras que tengamos los politic@as actuales no vamos a conseguir cambiar nada.

    1. Cierto, sobre todo insultando la inteligencia del personal con una supuesta relación entre el uso del masculino genérico con la discriminación de la mujer. Los países de habla anglosajona no tienen ese masculino genérico (the children, no es masculino ni femenino) y sin embargo adolecen de los mismos problemas de discriminación de la mujer. No creo que tenga que explicar el corolario de todo esto, pero MENOS AÚN en la UNIVERSIDAD! cojones!

  2. yo he le leído vicerrectora y ya no puede seguir, digo yo, que podían poner vicerrectoro de paso, no? a ver que es eso de no ponerle la o al final al género masculino… pero como me picó la curiosidad decidí pasar las hojas: no te lo pierdas, p.7: algunas cosas palabras sí que tienen una forma sola, la/el artista; el/la colega; pues yo exijo que digan el artisto y el colego y el dentisto, vaya, menuda discriminación masculina! en la página 9 ya me entran ganas de pegar unos tiros, llorar, o quedarme exiliada en Francia… que tristeza de país..

    1. Y acuérdate del futbolisto Raúl, del ajedrecisto Kasparov, de los taxistos, de los transportistos,… y eso por no hablar de los animales. El masculino de foca ¿es foco?, el masculino de gaviota ¿es gavioto?, el masculino de águila, ¿es águilo?.
      Yo como hombre estoy totalmente de acuerdo en la igualdad entre hombre y mujer, pero creo que a veces se lleva este tema a situaciones ridículas.

  3. Vuelvo a la carga, todo esto deberíamos denunciarlo, porque al final si no ganan los ‘tontol’haba’ de siempre, que parece que quieren hacer pasar a todo el mundo por idiota, y la cobardía de la gente (a ver si se piensan que soy machista, etc.), y unos por los otros, la tontería se extiende… Yo he dejado de leer la revista de Intermón-Oxfam que me mandan, porque no soporto más ‘los niños y las niñas, los hombres y las mujeres’ repetido hasta la saciedad en sus páginas.. Ellos son los que discriminan cuando se les ocurre que la gente puede pensar que si dicen ayudar a los niños estás excluyendo a las niñas, en qué cabeza retorcida cabe eso? hasta dónde puede llegar la imbecilidad de esta gente? perdón que me caliento. Y otro apunte más, gente como Pérez-Reverte ha denunciado y denuncia todo este tipo de imbecilidades (ojalá fueran sólo imbecilidades, pero como bien dices, nuestros impuestos están ahí; y no sólo eso, su presunta cruzada por no sé muy bien qué poner, multa y amenaza de multa, a la gente que no se quiera expresar como ellos: http://www.perezreverte.com/articulo/patentes-corso/438/chantaje-en-vigo/) en su columna y gracias a eso, no sé que fama de políticamente incorrecto se gana (seguro que la lleva con mucha honra), pero nos proporciona consuelo, adivino que a muchos en este país..

    1. Muchas gracias por el enlace. De hecho, he aprovechado y le he enviado al propio Reverte un enlace al artículo del blog ya al documento de la UGR para que lo añada a su colección.
      He echado un vistazo a algunos artículos de la serie de XLSemanal y hay uno del año pasado en el que habla de algo muy parecido pero en la Universidad de Zaragoza.
      Por lo que me cuentan, ya todas las Universidades «gozan» de esa estúpida unidad de igualdad, sumidero de fondos públicos y vete tú a saber si agencias colocadoras de familiares, amigos y allegados varios.

  4. Ya puede clamar la academia; ya puede publicar una gramática tras años de relexión y estudio, que chocará contra eeste muro cerril de intransigencia que, respaldado por el poder político, se permite, desde su ignorancia y cerrazón imponer u criterio gramatical, so pena de ostracismo despreciativo, a jueces y magistrados, científicos y literatos y a todo aquel que no asuma sus atrabiliarias y absurdas reglas. Es una nueva Inquisición que no nos quema porque no puede. Comensó hace unos años con aquel funesto «todos y todas»y ya nadie se atreve a olvidar el femenino, por ese miede absurdo que se ha instalado en la sociedad española a parecer machista, racista, fascista o vaya Vd. a saber qué.

  5. no se si te has enterado de la última, pues la SEÑORITA AIDO, para lograr la igualdad, ha propuesto la realización de un casting para ejecutivas, y que las empresas se obliguen a tener igual número de ejecutivos como ejecutivas.
    NO PODEMOS ASUSTARNOS POR NADA

  6. Esto es como el catecismo del nacionalcatolicismo de tiempos pasados: un documento oficial, producto de las modas, un discurso residual segregado desde los sectores más inanes, petard@s, e irrelevantes del poder. Molesta por tanta necedad pomposa, y por los fondos públicos que se derrochan, pero en realidad sólo descalifica a las personas que las proponen. Creo que la mejor actitud es armarse de una buena botella de vino, unas buenas tapas, y abordar el documento presto a desternillarse ante tanta tontería. El tiempo vendrá, y se los llevará. Entre tanto, la gente con dos dedos de frente seguirá trabajando, y a lo suyo, sin hacer demasiado caso. Y l@s que proponen este tipo de documentos, dentro de unos años, si todavía tienen capacidad para ello, se ruborizarán. O no.

    1. Completamente de acuerdo, sobre todo si lo concebimos en el ámbito estrictamente político. Pero insisto en que es desesperanzador que esto ocurra en el ámbito académico y en particular en la Universidad. Con estos mimbres, y con irresponsabilidad de nuestros gobernantes en materia de educación, lo que puede ocurrir – y quizás ya ocurre – es que este tipo de despropósitos, sandeces y demás patrañas sufragadas con fondos públicos, forme parte del manido «todo el mundo tiene derecho a opinar» que siempre se confunde con «todas las opiniones son válidas». Eso da un poco de miedo.

  7. Lo grave de esta gentuza, es que no vive de su opinion sino que nos quiere adoctrinar a base del dinero publico, por eso lo mas grave es prestarle atención, y entrar al trapo.
    A estos seguidores de todos los dictadores sudamericanos como los Castros que lo unico quieren es Castrar la inteliguencia. Aprovechemos la ocasión para ser menos sexita y llamemos a Castro, Castra. Y a estss sanguijuelas idiotas «Castratis».

  8. Miren, yo pensaba como ustedes, que el lenguaje está bien como está y que eso de «ciudadanos y ciudadanas´´ lo único que hacía era que el discurso fuese más anodino aún. Sin embargo, mi opinión se ha suavizado con el tiempo; y no es por la mera exposición a estas muestras lingüisticas sino por un mayor entendimiento del por qué de estas pautas.

    Todos sabemos dentro de las funciones del lenguaje no sólo se encuentra la tarea de denominar ideas sino que también de transmitir intenciones, prejuicios y de más valores previos que se activan simultaneamente al expresarse. Entiendo que no siempre ha de utilizarse el doble género pero en muchos cosas el omitirlo, sin querer, deja a una parte de la población en la sombra, no se ven representados, y disculpen, pero me refiero a nosotras. Estas intenciones suelen estar alojadas de manera profunda en nuestro subconsciente y, por ello, es difícil darse cuenta de ellas. Por eso, muchas feministas defienden un correcto uso del lenguaje, porque al cambiar el lenguaje, de algún modo, estás cambiando convicciones a favor de la discriminación.

    Asimismo creo que el lenguaje sí ha cambiado desde los tiempos que comentais de antiguos literatos y lo seguirá haciendo; así, algunas profesiones que antes eran sólo detentadas por hombre ahora lo son de mujeres también y, por ello, ha de modificarse para incluirlas.

    A pesar de lo que les comento, no estoy de acuerdo con las discriminaciones positivas en las que se cae actualmente puesto que sigue siendo discriminación ni con todas las medidas que llevan a cabo desde el Ministerio de Igualdad Soy feminista, no hembrista.

    1. Estimada Ruth,
      Discrepo rotundamente con su planteamiento que, aunque moderado, no deja de estar equivocado bajo mi punto de vista.

      El lenguaje es tan sólo un instrumento, moldeado por su propio uso y que cumple la ley natural del ahorro salival. No dudo que haya mucha simbología corporal que juega en la transmisión de información al interlocutor. Sin embargo, las criaturas de habla inglesa – que usan childen en lugar de los/as niños/as por poner un ejemplo, y que no son ajenas a esa simbología, adolecen de los mismos problemas en relación a la discriminación de la mujer.
      La gran falacia es afirmar que alteraciones del lenguaje pueden influir en las convicciones a favor de la discriminación. Las modificaciones que pueda sufrir un lenguaje – cuya escala temporal es de siglos, no de legislaturas – no se inducen, sino que simplemente se producen en función de las necesidades sociales del momento. La consecuencia es una mayor eficiencia en la transmisión de información.

      Es evidente que no entendió la ironía de mis palabras cuando mencionaba a la evolución del lenguaje desde el s. XII. Por supuesto que ha evolucionado y lo seguirá haciendo, el cambio ¡es inherente al lenguaje! – si no desaparece -, y sin embargo nada eso tiene que ver con la evolución social de la mujer. Ésta se ha producido gracias únicamente a la evolución (afortunadamente) de los valores sociales y éticos. El racismo hacia la raza negra en EEUU no desapareció – entiéndase en términos generales – porque dejara de llamarse negros a los negros, que por cierto siguen siendo negros. En EEUU había un problema de racismo, no de léxico.

      Así, la mejor manera de fomentar el respeto y la justa valoración de la mujer para evitar discriminaciones estriba en una buena educación en valores cívicos y socialmente éticos.

  9. Muchas gracias por informarnos de esta simpatico-absurda noticia.
    Pues si, creo que la pena es que tanta tonteria la pagamos todos (y vosotras también, sin discriminación) y que perdemos el tiempo hablando de esto en vez de los pronto cinco millones de parados (si, y de paradas también)
    Algo habrá que hacer y desde luego mi voto para ninguno de los partidos que se reparten el poder.
    Un saludo Juan Carlos y cía (ó cío)

Deja un comentario